Comprar un piso acarrea siempre una serie de gastos: notario, registro, impuestos, IVA o ITP que suponen aproximadamente el 10% del importe de la vivienda. Además, los bancos suelen ofrecer en sus préstamos hipotecarios no más del 80% del valor de tasación del piso, por lo tanto necesitaríamos una cantidad considerable de ahorros previos a la compra de un piso. Esto no siempre es posible. Algunas personas necesitarán financiar el 100% del piso y aún más, financiar también los gastos.

Para ello algunas entidades han creado las hipotecas 120%, es decir, hipotecas en las que el banco nos prestará el 120% del valor de tasación del piso. Lo cierto es que pocas son las entidades que la ofrecen y en todos los casos exigen que el préstamo hipotecario cuente con avales suficientes para cubrir esta cuantía extra. De otro modo, en caso de impago, el banco quedaría desprotegido pues podría suceder que el valor del piso no cubriese la deuda.

Desventajas

Las principales desventajas son que estos préstamos tienen mayores comisiones y mayor tipo de interés que otros préstamos hipotecarios pues el banco se cobra así la prima de riesgo que le suponen las Hipotecas 120. Normalmente se exigen también la contratación de otros productos bancarios como tarjetas, planes de pensiones o seguros del hogar que al final se suman al importe de nuestra cuota mensual.

La Hipoteca 120 en España es normalmente solicitada por los inmigrantes que desean comprar un piso. No es un servicio que publiciten las entidades bancarias pero a través de un agente financiero, por ejemplo un agente asociado a una empresa inmobiliaria se puede acceder, siempre presentando avales.

A la hora de conceder préstamos hipotecarios siempre se había tenido en cuenta por parte de los bancos que el piso, con el paso del tiempo, aumentaría su valor aumentando así las garantías para el banco. Con la actual crisis inmobiliaria ya no está tan claro que los pisos suban su valor imparablemente, por lo tanto en la actualidad las hipotecas 100% o 120% son más difíciles de conseguir que hace unos años y, como hemos dicho, con mayores costes.