El Euribor baja y baja y muchas familias están viendo su cuota rebajada en hasta 300€. Sin embargo, otra buena parte de las hipotecas incluyen en los contratos una cláusula por la que se limitan los efectos de la caída del Euribor, la llamada “cláusula suelo”. Es decir, por mucho que baje el Euribor, se establece un interés mínimo que la entidad cobrará y que suele estar en el 2% y el 3%, aunque se dan casos de hasta el 4,5%.
Al parecer, estas cláusulas ‘suelo’ y ‘techo’ (esta última limita también la variación en el tipo de interés, pero en este caso al alza) son legales y negociables, y son aplicadas por muchas entidades, pero no por todas. Además, no todos los bancos la aplican en todos los casos, así que para conocer si nuestro contrato tiene esa cláusula tendremos que leer la escritura o preguntárselo a nuestro banco directamente.